Los moños en Verano se ponen más de moda que nunca, porque se trata de unos peinados que puedes crear con pocos pasos y que te sacarán de más de un apuro.

Existen moños sofisticados, ideales para lucir en momentos especiales, pero otros son más informales y podemos lucirlos en cualquier ocasión, por ejemplo para ir a trabajar o para crear un look improvisado cuando no hay tiempo para arreglarse. 

En Verano es cuando más recurrimos al uso de los moños, porque nos permiten sobrellevar este calor, al igual que las socorridas trenzas, de este modo mantenemos la melena alejada del sudor y de la dichosa humedad. 

Fallos que cometemos con los moños

Pero, aunque puede parecer de lo más fácil realizarse un moño, no siempre resulta así, porque hay una serie de factores que debemos tener en cuenta y que os voy a mencionar.

Los moños para lucir un look sofisticado suelen estar muy trabajados para crear un resultado final perfecto y ese es uno de los errores que solemos cometer a menudo, no dedicar el tiempo suficiente a realizar el peinado. Hay que cepillar bien el cabello y colocarlo cuidadosamente pero sujetando firme, porque en caso contrario puede ser que con el paso del tiempo, el peinado se caiga poco a poco.

Antes de comenzar a preparar tu moño, debes de asegurarte de que tienes una cantidad más que de sobras de BUENAS horquillas para sujetarlo!!!

Y es que no hay nada más bochornoso que contemplar como el moño se va deshaciendo. Pero no solo se puede caer por no haber usado las suficientes horquillas y con una calidad adecuada, sino porque no lo hayas fijado correctamente con algún producto, no te cortes a la hora de usar gomina, laca o gel, porque estos productos de fijación son imprescindibles para que el cabello dure en su sitio intacto por muchas horas sin que ni un solo pelo se mueva de su lugar.

Recuerda que dependiendo el producto de fijación que uses, lograrás darle a tu moño un efecto mojado, más o menos rígido, etc.

Un error garrafal que todavía sigo oyendo es que para realizar un recogido, el pelo debe estar limpio, eso es falso. Al estar limpio, sobretodo si tienes el pelo fino, resulta muy difícil lograr que el peinado se fije. Lo ideal es haberte lavado el cabello el día de antes, aunque también puedes «ensuciarlo» a propósito, rociando el pelo con laca antes de proceder a trabajarlo. 

Fallos que cometemos con los moños

Esta temporada se lleva mucho usar un adorno para completar el peinado, pero cuidado con esto, si te excedes a la hora de adornar tu moño, supondrá un peso extra que puede terminar por estropear tu peinado si no eres capaz de sujetarlo todo muy bien, pero es que incluso, dependiendo del tipo de complemento que uses, este puede llegar a restarle el protagonismo al moño.

Si lo que buscas es un moño informal, existen mil y una formas de crear estos peinados, que incluso puedes improvisar y hacerlos con poco tiempo y con pocos materiales. Uno de los más clásicos y más usados es el característico moño de bailarina, que lo puedes hacer con la ayuda de un complemento que te ayudará a fijar de forma fácil la forma redonda de este peinado y que te servirá para darle volumen.

Fallos que cometemos con los moños

Debes saber diferenciar entre un moño y un recogido, por ejemplo, a mí, personalmente me encanta hacerme un moño italiano o pliegue francés, que era el recogido favorito de Grace Kelly, que podríamos catalogar como moño, aunque a ciencia cierte no lo es, no lo es tampoco ese peinado que se hace retorciendo mechones de cabello que se sujetan con horquillas… Existen muchos tipos de moños y formas de hacerlos, y por internet hay infinidad de tutoriales que te ayudarán con la decisión final.