Manteles, encaje, aplicaciones barrocas, joyas de la antigua Sicilia, el glamour años 50’s de las encorsetadas estrellas de cine italiano, el romance de Visconti, las viudas que van a la iglesia… Todo este universo cien por cien Dolce & Gabbana es el que reproducen y al que nos transportan las barrocas diademas que presentaron en su rica y tradicional colección de otoño-invierno 2012/2013. Ahora esas coronas, sensuales y explosivas, casi de princesa bizantina, se han convertido en una de las piezas estrella de este otoño.
Pero no son las únicas. También Rodarte tiene mucho que ver en está incipiente tendencia a adornarse el pelo con joyas. Las hermanas Mulleavy presentaron para esta temporada unas pequeñas y coquetas estrellas engarzadas en el pelo. Y como casi todo lo que desean Kate y Laura, estos pequeños adornos para el cabello ya se han convertido en hits. Igual que la poderosa influencia de Riccardo Tisci, a quien no le tembló el pulso a la hora de diseñar diademas conpuntiagudas tachuelas. Una idea arriesgada que ya practican las fervientes seguidoras deGivenchy y que sobre su rostro crea un efecto similar al de una aureola.
Sea en el formato que sea –barroco, caprichoso, clásico y punk– las coronas y demás adornos para el cabello son en este invierno pura tendencia y tienen el don de poder transformar un look.