Seguro que cuando llega el buen tiempo muy a menudo notas que tu cuerpo comienza con la retención de líquidos, notas las piernas muy hinchadas, están muy pesadas, de vez en cuando te dan calambres, etc.
Muchas personas no saben por qué retienen líquidos, a veces puede deberse a padecer alguna cardiopatía, por hipertensión, por un mal funcionamiento de los riñones, etc. Por eso es de suma importancia que consultes a tu médico cuando notes que tu cuerpo retiene más líquido de la cuenta.
Pero no solo los factores orgánicos pueden provocar que tu cuerpo retenga líquido, a veces el llevar una vida demasiado sedentaria, incluso una dieta desequilibrada pueden llegar a ser la causa de esta hinchazón de nuestro cuerpo, seguro que has notado cuando tienes el síndrome premenstrual que te hinchas, pero también sucede en la menopausia o el embarazo.
La retención de líquidos se puede producir, como ya os he comentado, por diversos factores, como pueden ser tanto problemas orgánicos como externos.
Problemas hepáticos, renales o cardíacos pueden llegar a estar detrás, cuando se trata de esto, hay que acudir lo antes posible al médico.
En los transtornos hormonales que se producen durante el síndrome premenstrual, embarazo o menopausia, se retiene mucho líquido, más de la mitad de las mujeres padecen retención durante esa etapa. Por ejemplo, durante el tercer trimestre de embarazo, se suele producir en tobillos y pies, en la menopausia se nota más por la ausencia de producción de estrógenos, y las mujeres con sobrepeso tienen una mayor predisposición a padecerlo.
Hay factores no orgánicos que pueden provocar este problema, como una mala alimentación, por ejemplo, el exceso de sal o abusar del alcohol. La vida sedentaria, la ropa muy ajustada, algunos medicamentos, etc, también contribuyen,
La retención de líquidos es muy molesta porque normalmente suele llegar de la mano de la mano de la temida celulitis. Evitar este problema también depende de ti, intenta seguir una dieta equilibrada y comienza a practicar un poco de ejercicio diario.
Aunque creas que si bebes mucha agua esto puede hacer que retengas más líquido, esto es solo un mito y completamente falso, el agua ayuda a tu cuerpo a depurarse y eliminas más toxinas. Lo ideal es beber dos litros de agua al día, si puede ser fuera de las comidas.
Di adiós a la ropa demasiado ajustada, porque con ella solo empeorarás el problema. Procura apostar por el uso de ropa cómoda y que te facilite la circulación. Dormir ocho horas al día es muy beneficioso para el organismo.
Las comidas con mucha sal son perjudiciales, ya que el sodio es el peor enemigo si padeces de retención de líquidos, porque comer alimentos muy salados hace que tus riñones tengan que trabajar más y puedes provocar esa hinchazón que tan poco te gusta. Por lo que reduce el uso de la sal y evita ingerir mucho embutido, frutos secos o conservas.
Comienza a incluir potasio en tu alimentación, porque te ayudarán a eliminar el exceso de sodio del cuerpo. Las verduras t las frutas, sobretodo el plátano, son ricos en este mineral. Además si tomas frutas o verduras con propiedades diuréticas como la piña, el pepino o los espárragos, estarás ayudando a eliminar el líquido de más.
Las infusiones son muy buenas para luchar contra la retención de líquidos, y te ayudarán a reemplazar el picoteo nada sano entre horas. Lo ideal es que apuestes por tomar un té verde, una infusión de cola de caballo, salvia, etc.
A partir de ahora, si tu problema no era orgánico, si sigues todos estos consejos, verás como puedes reducir esa hinchazón.