Si acabas de ser madre y quieres comenzar a recuperar tu silueta después del parto, nada mejor que comenzar con una dieta que no dañe tu salud y que poquito a poco te haga recuperar tu cuerpo.
Después del parto, son muchas las mujeres que comienzan a pensar en volver a tener la misma figura que antes de su embarazo, quieren adelgazar cuanto antes los kilos de más que subieron, pero todo esto conlleva un tiempo, por mucho que veamos a las famosas luciendo cuerpazo a pocas semanas de dar a luz.
Lo primero que debes hacer es escoger una dieta que se vaya a adaptar a tus nuevas necesidades y compaginarla con un poco de ejercicio diario, de este modo el paso hacia tu antigua silueta te resultará más fácil.
Si has decidido darle el pecho a tu hijo debes tener en cuenta que no puedes hacer una dieta drástica, pero sí puedes ir preparando tu cuerpo con una dieta sana, equilibrada y saludable.
No te pongas un tiempo para recuperar tu silueta, todo depende de la complexión de cada una y de la rapidez de recuperación, yo, por ejemplo, tardé tres años en volver a tener mi figura, pero porque me lo tomé con calma y la verdad es que estoy feliz con el resultado. Si te marcas un tiempo, puede que no llegues y te obsesiones y te frustres. Jamás te compares con otras mamás, y mucho menos con las famosas, que no solo pasan por dietas y ejercicios sino por el quirófano, para recuperar su cuerpo escultural. Lo importante es que llegues a un peso en el que te sientas a gusto contigo misma, aunque no sea exactamente el de antes de tu embarazo.
Tu cuerpo necesita un tiempo para recuperarse del parto, por lo que deberás esperar como poco hasta la sexta semana antes de comenzar con tu plan de adelgazamiento. En caso de estar dando el pecho, no podrás comenzar hasta pasados tres o cuatro meses para que la leche no se vea afectada.
No se te ocurra comenzar con una dieta demasiado severa porque puede incidir mucho en tu estado de ánimo, y además como no vas a dormir lo suficiente durante meses, te provocará más cansancio del que ya llevas encima. Si permites que tu cuerpo se recupere, te vas a sorprender gratamente de que comenzarás a perder peso de manera totalmente natural.
Lo que sí debes tener en cuenta es que es posible que no vayas a recuperar el peso que tenías antes de quedarte embarazada, porque tu cuerpo ha sufrido unos cambios que muchas veces son permanentes como por ejemplo un vientre más blando, o unas caderas y cintura bastante más anchas… Tú tranquila, no te obsesiones por eso, además un cuerpo más contorneado te hará verte más sensual, lo que debes hacer es recuperar la figura con la que te sientes a gusto de una forma saludable.
Una mujer suele necesitar entre 1500 y 2000 calorías al día para mantener una salud perfecta, pero por ejemplo, si estás dando el pecho a tu bebé, vas a necesitar como poco unas 1800 calorías, ya que lo ideal es entre 2000 y 2700 calorías.
Lo malo de llevar una dieta estricta o una dieta que se haya puesto de moda es que, sí, perderás peso, pero al comienzo, esos primeros kilos son líquidos y regresarán tan rápido que no te darás cuenta, y también lograrás perder músculo por lo que volverá en cuanto regreses a comer «normal».
No te saltes las comidas, ya sé que al principio de tener a tu bebé en casa estás tan ocupada que no tendrás tiempo ni para comer, pero saltarte las comidas no te va a ayudar a perder peso, porque te entrará ansiedad y comenzarás a picotear.
Lo ideal es comer seis pequeñas comidas durante el día en lugar de tres comidas copiosas, de esa manera lograrás tener tu ansiedad bajo control, y esta nueva forma de alimentarte se adecuará más a tus horarios.
Consume leche y productos bajos en grasa, alimentos integrales, frutas y verduras crudas.
Bebe de 2 a 3 litros de agua al día, puede ser agua, pero también zumos de frutas naturales, verduras y hortalizas licuadas, etc y evita consumir dulces porque te aportarán calorías extra que no te servirán de nada.