Muchas mujeres, cuando se pasa la treintena, comienzan a dejar de sentir deseo sexual, muchas son las razones y las causas, pero ese es otro debate, lo cierto es que para solucionar este problema se ha presentado la viagra femenina.
La píldora llamada «flibanserina» se ha desarrollado para tratar el deseo sexual hipoactivo (DSH) o el trastorno del interés sexual (SIAD) en mujeres, es decir, para resumir, trata la pérdida de deseo sexual femenino que dura más de seis meses.
La Viagra femenina tiene adeptas pero también detractoras
Seguramente esta historia te puede resultar familiar: Al nacer el primer hijo, el deseo sexual de la mujer ha decaído sin saber por qué, piensa que es algo pasajero, pero pasa el tiempo y no lo recupera. No funciona ningún remedio y ya está desesperada…
Pues los estudios clínicos con flibanserina, han demostrado que el deseo sexual de las mujeres que se apuntaron al ensayo despertaba y que la percepción que tenían de ellas mismas iba cambiando.
Después de tres años de ensayos clínicos la viagra femenina ya se ha puesto a la venta con el consiguiente debate, porque no está muy claro qué es lo que se trata, ya que una cosa es el deseo, es decir un estado mental, y otra distinta es la excitación física. Tanto uno como el otro pueden provocar la siguiente causa, es decir que es el perro que se muerde la cola, pero las mujeres que sufren de SIAD no detectan los signos físicos de excitación de una forma evidente, con lo cual es muy complicado desencadenar ese deseo. Para resumir, la viagra femenina tiene que conectar el cerebro de las mujeres con sus organismos, y aunque hay muchos medicamentos en prueba, todavía surgen ciertas dudas.
La flibanserina, un compuesto químico que actúa sobre ciertos neurotransmisores del cerebro tiene una doble acción, por un lado es un medicamento activador que se encarga de unir a receptores de la serotonina, que es un neurotransmisor del sistema nervioso central. Después de esa unión, activa este neurotransmisor como pueden hacer otros medicamentos para la depresión.
Lo cierto es que este compuesto se pensó en un principio para luchar contra la depresión, pero descubrieron que la flibanserina también se agarra a otros receptores neuronales, en concreto que es la que interesa, a la dopamina (otro neurotransmisor),y en vez de activarlo, lo inhibe.
La viagra femenina que se ha comenzado a comercializar solo tiene una sola aplicación, eleva la líbido de las mujeres que sufren de trastorno del deseo sexual hipoactivo (TDSH). Eso sí, para que no haya lugar a confusiones, esta pastilla no funciona con la desidia sexual fruto de la monotonía, del paso del tiempo o con otras disfunciones sexuales de tipo físico.
O sea, que la viagra femenina solo pueden tomarlo mujeres que padecen de TDSH, y que todavía no hayan llegado a la menopausia, así que no pueden tomarlo aquellas mujeres qye presentan un marcado bajón de deseo sexual por diferentes enfermedades físicas o psicológicas o incluso por problemas de pareja. Además, si se toma después de la menopausia, lo que se lograría es un efecto placebo.
Por otra parte, el uso de la viagra femenina no está indicado para mejorar el rendimiento sexual, sucede igual que con la pastilla masculina, la cual muchos hombres usan para tal fin equivocadamente.
Pero cuidado con la viagra femenina ya que tiene tantos efectos secundarios que en Estados Unidos, la FDA ha obligado a la farmacéutica que lo ha creado a destacar los problemas que conlleva tomar este medicamento en el envase…
¿Qué tiene que ver con la Viagra masculina?
Pues no tiene que ver nada de nada, la pastilla de la mujer es rosa, la masculina azul, la flibanserina actúa a nivel del sistema nervioso central, la viagra masculina es un vasodilatador, la viagra de las mujeres actúa a nivel psíquico, el otro físico. Es decir que la viagra masculina es más física y la femenina más mental. Mientras que la Viagra se toma poco antes de mantener una relación sexual y dura unas horas, la flibanserina se debe tomar todos los días.
Hay ginecólogos que no están a favor de esta nueva pastilla, y se preguntan si no estamos ante otro caso de enfermedad que se ha inventado para vender más medicamentos. Porque, a parte de la baja incidencia de casos reales de TDSH, la mayoría de los problemas de bajo deseo sexual se pueden solucionar con terapias de conducta y otro tipo de tratamientos con menos efectos secundarios…
El debate y la polémica están servidos, ¿viagra femenina sí o no?